La Academia venció 2 a 0 a Botafogo (4 a 0 en el resultado global) y se consagró campeón de la Recopa Sudamericana. El equipo de Gustavo Costas fue dueño y señor del encuentro, dominó la serie a su antojo y redujo al campeón de América a su mínima expresión. Matías Zaracho y Bruno Zuculini anotaron los goles del conjunto argentino.

“No pongo las manos en el fuego, pongo mi cuerpo entero por este plantel”. Las declaraciones de Gustavo Costas, el padre de la criatura, luego de la derrota ante Argentinos Junios en conferencia de prensa pudieron ser el puntapié inicial donde Racing abandonó las ocupaciones domésticas para comenzar a pensar definitivamente en el primer objetivo del año.

Y el equipo volvió a responderle al entrenador y a representar a los hinchas y socios de Racing. A los 4.200 que pudieron estar en Río de Janeiro y a los millones esparcidos por todo el mundo. El equipo albiceleste volvió a poner al fútbol argentino en lo más alto de América como lo había hecho en noviembre, en Asunción, ante Cruzeiro.

Sin lugar a dudas, a este equipo y cuerpo técnico le gustan mucho esta clase de citas. Anoche, no fue la excepción. El conjunto de Avellaneda tuvo unos primeros 30 minutos brillantes donde empezó a convertir en figura a John, el portero del Fogao, que tuvo intervenciones magistrales para dejar con vida al elenco carioca en la serie.

Salas, incansable una vez más, enloqueció a la última línea y volvió a generar muchísimo; tanto en aquellas jugadas que terminó finalizando con remate como en las aproximaciones en las que alguno de sus compañeros exigió al lungo golero (Colombo, entre otros).

El partido también tuvo momentos donde La Academia se replegó y supo darle pelota y terreno al elenco local. Botafogo nunca pudo encontrar espacios para que Artur y Savarino crearan juego entre los mediocampistas y los stopper. Una enorme tarea absolutamente coordinada entre Zuculini y Nardoni hizo que el juego albinegro tuviera que volver a empezar desde abajo con Jair Cunha y Alexander Barboza.

De una falta innecesaria de Marco Di Cesare a Matheus Martins, llegó el cabezazo de Barboza que Arias logró desviar junto con el travesaño para salvar el arco albiceleste. A partir de entonces, el conjunto local recién logró desperezarse a los 30 minutos de la primera mitad. Un buen remate de Martins, que bajó repentinamente pero que terminó yéndose por encima del horizontal, pudo abrir el resultado.

El premio a la intensidad y a plantarse nuevamente iniciado el complemento tuvo su premio para Racing a los 4 minutos de empezado el segundo tiempo. Luego de un saque desde el arco de Arias, Barboza despejó de cabeza hacia su derecha, Gregore perdió en el duelo ante Maravilla quien envió un centro algo pasado.

El balón le quedó a Martinera quien, de zurda remató al arco. El disparo rebotó en el ex defensor de Independiente quien, para su desgracia, terminó habilitando a Matías Zaracho. El canterano nacido en el Predio Tita puso el balón en el ángulo sorprendiendo a John que nada pudo hacer. Golazo.

El fútbol le daba revancha a un futbolista que no había tenido un buen año y que no pudo disputar la final de la Copa Libertadores con su anterior equipo, Atlético Mineiro. Con pasos cortos y muy de a poco, Zaracho se vuelve a encontrar con su mejor versión, acompañado de un equipo que lo cubre y respalda.

A los 24 minutos, ya con el encuentro partido por las pocas ideas de Botafogo y el desánimo general de sus futbolistas ante tamaña superioridad, llegó la estocada final. Luego de varios toques en las inmediaciones del área grande, Gastón Martirena envió un centro muy corto para Maravilla que Zuculini anticipó, bajó de pecho y remató seco para que el grito del 2 a 0 sea interminable.

La serie volvió a confirmar que lo de Juan Nardoni es cosa seria, que Arias siempre está, que Costas decidió bien en incluir a Zuculini y sacar del once inicial a Almendra y que posiblemente Nazareno Colombo se convierta en un futbolista de real valía. El ex Defensa y Justicia tuvo que reemplazar a un baluarte como Santiago Sosa y fue figura; tanto en el Cilindro como en el Estadio Nilton Santos.

La alegría va a ser extensiva por largo rato, pero el equipo deberá descansar y recuperar fuerzas para una seguidilla importante previa al debut por Copa Libertadores. Con un partido menos, se encuentra fuera de la zona de clasificación y tiene que enfrentar a San Lorenzo, Huracán e Independiente en los próximos tres compromisos.

“¿En qué están pensando?”, les consultó Costas a sus dirigidos, luego de la victoria. Los jugadores, el cuerpo técnico, la dirigencia y los hinchas sabemos muy bien cuál es la respuesta. Este plantel le demostró a todos que nada es imposible. A seguir creyendo.

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