La Academia venció 3 a 0 a Colo Colo en el Estadio Monumental David Arellano, en el último amistoso preparatorio para el inicio de la actividad. El equipo de Gustavo Costas se tomó muy seriamente el choque ante el elenco Cacique. Presionó en todo momento a su rival y lo llevó a jugar un encuentro incómodo. El encuentro sirvió para ver los primeros movimientos de Ignacio Rodríguez y de Adrián Balboa.
Como si fuera una verdadera final. Así se planteó el partido Racing. Para Colo Colo, pero principalmente para sí mismo. Considerando que el equipo que tuvo enfrente tranquilamente podría ser un competidor directo en la fase de grupos de la Copa Libertadores.
El equipo de Jorge Almirón pocas veces pudo conectar y estar en partido. Algunas estocadas de Arturo Vidal, con triangulaciones (que liberaron la zona para asistir al espacio a los laterales) y de Lucas Cepeda, de buenos movimientos, fueron todo el repertorio del campeón trasandino. No hubo buenas terminaciones. Sólo un disparo al arco de Javier Correa en la segunda mitad, desviada al corner por Arias.
Por el lado del campeón sudamericano, la estrategia fue encontrar superioridad numérica ocupando el ancho del terreno y defendiendo mano a mano en el fondo. La sincronización de la última línea se dio de forma natural y los stopper se anticiparon en todas las jugadores a los atacantes del conjunto local.
En la primera mitad no pudo verse más que buenas intenciones por parte de la visita y la notoriedad de un partido amistoso de verano, con las equivocaciones propias de estos partidos.
El cabezazo de Santiago Sosa, a los 5 minutos de iniciada la parte final y tras un gran centro de Gabriel Rojas desde la izquierda, abrió el partido. Esto le permitió a La Academia prescindir de la tenencia, ya que lanzando largo pudo dejar varias veces a sus delanteros de cara al portero Brian Cortéz.
A los 33 minutos del complemento, un saque de arco de Gabriel Arias fue directo a la cabeza de Adrián Balboa (de interesante presentación). El uruguayo, con su parietal derecho, habilitó a Santiago Solari quien definió de primera, entre las piernas de Cortéz. Premio para el extremo que, a pesar de no poder terminar de la mejor manera varias ocasiones, no se apesadumbró y siguió insistiendo.
Sobre el cierre del encuentro, nuevamente Rocky avanzó por derecha le ganó la posición en velocidad a Jonathan Villagra y, teniendo el arco de frente, decidió habilitar nuevamente a Solari. El ex delantero de Defensa y Justicia sólo tuvo que empujar el balón a la red para decretar la goleada.
La actitud, la concentración y la presión fue lo más destacable en el choque ante el equipo chileno, más allá de las anotaciones que siempre son importantes para ganar confianza. Ahora queda aguardar el inicio de lo importante con el ánimo bien arriba.