Racing no bajó el acelerador que apretó a fondo el jueves por la noche y este domingo, con mayoría de suplentes, derrotó 2 a 0 a Instituto. La Academia entendió que no podía perder más puntos en la Liga Profesional y, con el triunfo, logró acomodarse mejor en la tabla anual quedando a ocho unidades de la cima.

Luego del éxtasis por la clasificación a una final continental luego de 32 años, el equipo de Avellaneda debía presentarse una vez más en el Cilindro. Enfrente tuvo a un equipo con mejor cosecha de puntos en lo que va del certamen, pero con un dejo de irregularidad en sus últimas presentaciones. No obstante, cualquier rival podría generarle peligro a un once alternativo que jamás dio garantías.

Sin embargo, la adrenalina que el plantel vivió entre semana le jugó a favor a quienes hacía apenas siete días habían hecho un gran papelón ante Banfield en el Sur. La actitud fue completamente distinta. El conjunto local salió determinado a quedarse con los tres puntos y devolverle a la gente la gratitud por hacerse presente; aún con números poco alentadores en el plano doméstico.

El nivel colectivo e individual de los futbolistas fue más que bueno. El punto más alto en la tarde del domingo fue la actuación de Nazareno Colombo. El canterano de Estudiantes de La Plata estuvo certero a la hora de cerrar en varias oportunidades y fue quien inició la jugada en la apertura del marcador a los 8 minutos del primer tiempo y quien la finalizó; con una definición majestuosa.

Luego del 1 a 0, La Academia siguió jugando el partido con mucho compromiso, imprimiéndole un ritmo que hacía rato no se veía en varios de sus protagonistas. Facundo Mura y Santiago Solari se entendieron a la perfección. El ex atacante de Defensa y Justicia volvió a tener una buena tarde, como ante el Halcón en la última victoria en Avellaneda y el lateral terminó una gran jugada colectiva yendo a fondo, dejando dos hombres en el camino y definiendo de zurda.

La ventaja de dos goles en 25 minutos le permitió a Racing replegarse y aguardar una reacción de la visita que recién llegó sobre el cierre de los primeros 45 minutos.

En el complemento, producto del desgaste y de la diferencia en el marcador, Racing dejó crecer demasiado en tenencia a La Gloria. El equipo de Diego Dabove se impuso en campo rival ocupando el ancho del terreno pero no generó peligro. Apenas un cabezazo de Damián Puebla, tras buen centro de Gregorio Rodríguez encontró bien ubicado a Cambeses que envió el balón al corner.

El encuentro sirvió, entre otras cosas, para ver las aptitudes técnicas de Martín Barrios quien tuvo una interesante actuación. El uruguayo, de los que menos minutos sumó en la temporada, había sido de lo mejor ante Banfield y ayer, con una escenario mucho más favorable, se lució mucho más. Tiene condiciones para demostrar que la erogación económica que hizo la institución por él no fue en vano.

El triunfo le permite a Racing mirar más de cerca la cima, a pesar de la distancia de 8 unidades con Vélez, único puntero de la Liga Profesional a falta de 21 puntos por disputar. Sólo un milagro podría coronar a Racing en el torneo argentino. No obstante, el equipo de Gustavo Costas está obligado a sumar la mayor cantidad de puntos y recuperar el terreno perdido.

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